Esta noticia
extraída del periódico El Mundo en su
versión digital, es un claro ejemplo de hasta dónde puede llegar la codicia del
hombre además de hacernos ver que en España estamos muy avanzados en esto de
los desahucios a causa de deudas.
Este mañana me enteré de esta noticia por las redes
sociales, más exactamente mediante Twitter y la verdad es que me quedé
ciertamente sorprendido. Se había paralizado un desahucio de una familia que en
estos momentos, por problemas médicos y por la edad de algunos de sus miembros,
ha sido frenada. Lo peor del asunto, es la cantidad supuestamente no devuelta a
un prestamista que venía avalada por la vivienda en cuestión. ¿Será esa
cantidad muy elevada?, ¿superará a la
deuda que partidos políticos o clubes de fútbol tienen?, pues la respuesta es
negativa en ambos casos. La cantidad son 114 euros que en el momento en el que
se dio el crédito, los años 60, eran 119.000 pesetas.
Desde mi punto de vista, cualquier deuda tiene que ser
devuelta pero, ¿vale todo? Este tipo de actuación y más en este caso es abusivo
cuando incluso la familia, que según ellos ya pagaron esa deuda, dicen que la
reembolsaran en el periodo que su capacidad adquisitiva le permita. Cientos de
familias por un motivo u otro sufren desahucios pero no solo eso, sino que una
vez perdidas sus viviendas, deben seguir pagando la deuda. Esto, en otros países
no ocurre. Cuando se deja la vivienda, se cierra la deuda con la institución de
crédito lo cual es mucho más justo desde mi punto de ver. Aunque siempre como
última opción, si es que se puede ver moral estas actuaciones. ¿Por qué el
gobierno español no actúa frente a este problema y cambia la ley para
asimilarla en la europea?, ¿puede que no quieran que los bancos tras ello les
embarguen los “headquarters” de sus partidos por esas deudas no devueltas?
Otro dato sorprendente de la noticia es el por qué de
que la familia del prestamista, ya fallecido, no acepte la devolución del dinero
y es que les interesa el terreno donde se encuentra edificada la vivienda. La falta
de empatía asusta por su ausencia Me parece demencial esa actitud cuando se
juega con algo tan vital, recogido en la constitución, que es el derecho a
vivienda. En la sociedad actual creo que es necesario recuperar valores que
antes puede que existieran pero que se están perdiendo y que en mi opinión, provocan
que la sociedad se desvalorice.
En definitiva, quiero llamar la atención con esta
entrada sobre la necesidad de cambiar la ley de desahucios española la cual
deja mucho que desear y por otra parte, concienciar de que en este momento de
dificultades económicas hay que estar más con quien más lo necesitan y formar
una sociedad que pierda el tinte individualista que lo está acaparando todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario